El Salvador, Honduras, Colombia, Venezuela y Guatemala son las cinco naciones más peligrosas de Latinoamérica, y según un informe de la organización Small Arms Survey están incluidas en el ranking de los países con más muertes violentas en el mundo.
Alrededor de 526 mil personas mueren trágicamente cada año, de las cuales 396 mil son víctimas de homicidio premeditado, 54 mil asesinadas de manera no intencional y otras 21 mil en el marco de la intervención de las fuerzas de seguridad de los Estados, según reseña EFE.
Las cifras indican -según el informe de Small Arms Survey, titulado “Carga Global de la Violencia Armada”- que de todas estas muertes tan sólo el 10% (55.000) ocurre por conflictos bélicos o como consecuencia de acciones terroristas. El resto son perpetradas por individuos particulares.
“Las armas de destrucción masiva son ligeras y causan el 90 por ciento de las muertes violentas en el mundo”, dijo el embajador Alexandre Fazel, representante de Suiza -país que patrocina el informe- ante la Conferencia de Desarme de Ginebra, que intervino en la presentación oficial del documento, precisó la agencia de noticias EFE.
Un cuarto de estas muertes violentas ocurren en tan solo 14 países, de los cuales cinco son latinoamericanos. Se trata de naciones que tienen una tasa anual promedio superior a 30 muertes violentas por cada 100.000 habitantes y que son, por este orden: El Salvador, Irak, Jamaica, Honduras, Colombia, Venezuela, Guatemala, Sudáfrica, Sri Lanka, Lesotho, la República Centroafricana, Sudán, Belice y la República Democrática del Congo.
El informe destaca que “el nivel de violencia armada en algunos países exentos de conflictos se asemejan a los de las zonas en conflicto”, como deja de manifiesto el hecho de que entre 2004 y 2009 el número de muertes por habitante fuera mayor en El Salvador que en Irak, que en ese periodo vivió en estado de guerra.
El documento hace también hincapié en que “la violencia letal se caracteriza por una desigualdad de distribución no solo entre países, sino además dentro de un mismo país”. El ejemplo más claro es México, donde la tasa de muertes violentas se elevó en 2009 a 18,4 por cada 100.000 habitantes, mientras que en Ciudad Juárez, al norte del país, la tasa alcanzó 170,4 por cada 100.000 habitantes en el mismo año, es decir, una tasa 20 veces por encima de la media mundial.
“La victimización es mucho más alta en zonas del norte de México que en muchas zonas de guerra”, destacó Keith Krause, uno de los autores del informe de Small Arms Survey, que consideró que sólo se encuentra un denominador común para explicar las causas de esta violencia: el subdesarrollo económico y la desigualdad social.
“Sabemos que cuando un país avanza en términos de desarrollo, es muy probable que muestre una disminución de sus niveles de violencia letal”, agregó. En este sentido, enmarcó la situación en países como Brasil y Colombia, donde pese a seguir habiendo unos niveles muy altos de muertes violentas (49 por cada 100.000 habitantes y 27 por cada 100.000 habitantes, respectivamente), “se ha registrado una tendencia a la baja de este fenómeno”, según Krause.
En Honduras se produce un asesinato cada 74 minutos
Honduras sufre una ‘epidemia’ de muertes violentas y por segundo año consecutivo se encuentra en el primer lugar del mundo por número de homicidios diarios y anuales por cada 100.000 habitantes. Así lo revela el ente estatal de derechos humanos en un informe presentado al Congreso Nacional.
Conforme a la Organización Mundial de la Salud el índice ‘normal’ es de nueve homicidios por cada 100.000 habitantes. En Honduras a lo largo del año pasado se registró una tasa de 86,5 homicidios por cada 100.000 habitantes, lo que significa que se duplicó en un lustro.
En 23 meses de gestión del Gobierno presidido por Porfirio Lobo (investido el 26 enero del 2010) cayeron víctimas de las armas de fuego, puñales y otras armas contundentes o fueron estranguladas 12.838 personas. Es decir, han sido registrados un promedio de 558 asesinatos mensuales o 19 diarios.
Sólo en el 2011, el número de muertes violentas en cifras absolutas ascendió a 7.104, o sea una víctima cada 74 minutos. Por ello el organismo humanitario señala que se trata de “una crisis de inseguridad pública” que es comparable con la crisis económica que se vive.
El segundo lugar en la lista de los países más violentos del mundo aparece otra nación de América Central: El Salvador, que anteriormente la lideraba. Según los últimos datos disponibles, la tasa era de 66 homicidios. En la tercera posición en la lista aparece un país africano: Costa de Marfil, cuya vida política desde finales del año 2010 se acercó al grado de guerra civil, debido a la investidura simultánea de dos presidentes.